El pasado 30 de septiembre se celebró la final del primer concurso amateur de salmorejo cordobés. El jurado fue presidido por Rafael Moreno Rojas, secretario de la Cátedra de Gastronomía de Andalucía, con miembros tan destacados como Almudena Villegas Becerril, Celia Jiménez Caballero, José María Penco Valenzuela, Juanjo Ruiz Álvarez, Manuel Bordallo Romero, Matías Vega Ortíz y Silvia Rivas Grande. A algunos de ellos los podéis ver en la foto superior «con el móvil en la mano» mientras juzgaban los salmorejos que tenían delante. No, no era un descanso, pero tampoco estaban whasappeando o mirando Facebook. «Realmente estaban votando a través del móvil«.
Esta ha sido una de las peculiaridades que ha tenido la final de este concurso, ya que los jueces han contado con una «aplicación» on-line para poder cumplimentar la ficha de cata y puntuar todos los salmorejos que se calificaron para la final.
La forma de votar era bastante sencilla y rápida como se puede ver en este vídeo de ayuda que se hizo para el jurado:
Gracias a este sistema, además de evitar papeles (hay que proteger el medio ambiente) y poder ir realmente rápido en la votación, pudimos obtener los resultados de inmediato, pues no era necesario transcribirlos o hacer ningún tipo de cálculo.
Para evitar cualquier sesgo, cada miembro del jurado tuvo que catar y puntuar todos los salmorejos. Esto es debido a que aunque todos estamos muy relacionados con el salmorejo, algunos como profesionales de la cocina, y otros como degustadores experimentados y amigos de este plato insignia de nuestra cocina, obviamente, tenemos nuestro criterio sobre los valores óptimos que se debe pedir al plato. Lo podemos ver más claro en el gráfico de puntuaciones finales del concurso, en los que aparecen los números de los salmorejos en concurso (modalidad de batidora) y con cuanto contribuyó cada jurado a esa puntuación (guardando el anonimato de cada juez).
Podemos comprobar como los jurados A y B, sistemáticamente votan a todos los salmorejos más bajo que el resto de compañeros, por lo que si se hubiesen hecho dos grupos de jurado, los salmorejos catados por estos dos miembros quedarían perjudicados.
En general un buen nivel (no olvidemos que venían de una selección previa) con ambiente festivo y gran contento de los concursantes, pues todos se llevaron la batidora con la que habían concursado, incluso los de majado, por gentileza de Milar Andalucía.
Al día siguiente del concurso, se anunciaron los ganadores (para el jurado eran sólo números), se les dieron los sustanciosos premios por parte de Supermercados Piedra y otros colaboradores del evento. Se sortearon también revisiones de autos, gentileza de Cosersa. Tras un show cooking de la mano de Matías Vega, pudimos catar todos, un salmorejada hecha por este mismo cocinero, con Aceite Virgen Extra de la DOP de Baena, y se repartieron vales de descuento para cerveza en el Mercado Victoria, organizador, junto a la Cofradía Gastronómica del Salmorejo Cordobés y Piedra, de este Primer Congreso Amateur de Salmorejo Cordobés.
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